Un nuevo golpe recibió el expresidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), Francisco Egas, tras la decisión de la FIFA, de declararse no competente para analizar el proceso de su remoción por parte del Comité Ejecutivo del organismo.
A criterio del organismo mundial, la designación de Jaime Estrada, compete a un tema de gobernanza de la entidad nacional por lo que no le corresponde intervenir.
Asunto interno
Luego que Egas presentara ante el Comité de Ética de la FIFA la apelación para declarar nula la designación de Estrada, como presidente de la FEF (apoyada por 6 de los 9 miembros del Directorio) el ente del balompié mundial dictaminó que los hechos no están tipificados en su Código Disciplinario, lo que ratifica, de facto, la designación de Estrada.
“De un análisis de los hechos reportados, se observa que la presente situación parece ser un asunto relacionado con la gobernanza interna de la FEF, por consiguiente, la Comisión Disciplinaria entiende que no tiene competencia para el análisis o posterior enjuiciamiento de los hechos” citó la carta enviada por el jefe de la Comisión Disciplinaria de la FIFA, Carlos Schneider.
En materia legal
Tras este pronunciamiento, el constitucionalista y síndico del Emelec, Antonio Pazmiño, explicó que si para la FIFA no es competente resolver lo pedido, menos lo sería para la Conmebol, por lo que Estrada deberá enviar una carta a este organismo, citando el dictamen de la FIFA, y pedir su acreditación como presidente y a la nueva directorio, en el que Egas es tercer vocal.
El respaldo de Estrada como presidente de la FEF es claro, debido que cuenta con el apoyo de la mayoría de los clubes nacionales y mantiene una buena relación con la Liga Pro, mientras que Egas, mantiene una lucha soterrada contra los principales equipos y sus presidentes, tras la destitución.
Hasta el momento, la Conmebol no se ha pronunciado, sin embargo juristas del deporte descartan un pronunciamiento, una vez que el máximo organismo, emitió ya su criterio.
El intento fallido de Egas de acudir a la justicia ordinaria para apelar, fue retirado, (aún antes de ser analizado) y ahora afronta un proceso en la FIFA, debido a la prohibición del organismo de presentar ante tribunales civiles, temas relacionados con el fútbol.